Raf Simons y Kvadrat nos llaman al orden | Arquitecturas

2022-10-22 19:18:23 By : Ms. Alice Z

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El textil contemporáneo es el hilo del que tiran Raf Simons y Kvadrat, diseñador tan deseado él como lo es la firma para arquitectos e interioristas. En ello se han empleado los últimos años, en concreto desde que su colaboración subiera a la pasarela en 2014: en enero de aquel año presentó Simons la colección masculina que creó junto al artista Sterling Ruby y para la que utilizó los textiles de la marca danesa.

Ahora van más allá con la familia de accesorios The Shaker que echa raíces en el pasado con la voluntad de crear belleza a partir del orden. Este principio, que bien podría firmar Marie Kondo, es el que vertebra la propuesta: todo un hábitat adosado a una barra horizontal.

La solución es devota de la estética Shaker, grupo religioso de vida comunitaria sencilla y ordenada para la que fabricaron en el XIX mobiliario luego reivindicado por su utilidad. "La idea original era pensar en la casa en su conjunto, habitación por habitación, no de forma literal, sino como una reflexión sobre como vivimos realmente. No hicimos una aproximación desde un punto de vista estético, sino desde la funcionalidad y las necesidades y nos pusimos en la piel del usuario", argumenta Raf Simons.

De hecho, el diseñador pone su propia experiencia al servicio de estos accesorios: "Me he mudado muchas veces, de Europa a América y de vuelta, siempre obligado a organizarme en una nueva casa. Hay muchas tendencias diciendo cómo deberías afrontarlo pero nunca encontré el sistema correcto, el bonito e inteligente. Así que procede realmente de una necesidad personal".

La barra (120 cm, 496 euros) a partir de la que se articulan los accesorios es heredera directa del movimiento Shaker combinada con las esculturas minimalistas de John McCracken, con su uso de la intensidad de color y el acabado de las superficies. De ello bebe la propuesta de Simons que tapiza barra y accesorios del tejido Vidar 4 que desarrolló junto a Kvadrat.

Este mismo textil es el que determina la paleta con una apuesta decidida por las combinaciones monocolor: rosa, negro, hueso y verde. "Más que nunca el hogar es el verdadero centro de nuestras vidas y quería crear un sistema que lo mejorara. Me he formado como diseñador industrial, proponer productos sólo bonitos no era suficiente. Quería concebir algo relevante para cómo se vive hoy", se explica Simons.

De donde aquellos protodiseñadores Shaker colgaban herramientas y hasta sillas, ahora penden gorra (248 euros), llavero (de cuero, 278 euros), espejo (forrado de cuero, 893 euros), bolso, cojines, toallas, revistero... y así hasta 26 elementos variados para configurar el espacio a diferentes escalas como apunta su creador: "Quería algo que pudiera situarse en cualquier lugar sin resultar pretencioso. Puede resultar arquitectónico y definir un espacio o puede funcionar en un apartamento de 35 metros en Tokio, por ejemplo".

Pensando en el recibidor, hay una propuesta de la que penden llavero, gorra y tote bag (596 euros). Para el salón, cojines, espejo, revistero y compartimentos de almacenaje. "Espero que sea inspirador para la gente a la que le gusta comprar pequeños objetos con el mismo pensamiento que cuando compran una silla".

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